martes, 17 de febrero de 2009

Libertad de expresión en riesgo

“No existe ni una libertad perdida para siempre ni una libertad conquistada para siempre: la historia es un entramado dramático de libertad y opresión, de nuevas libertades a las que contestan nuevas opresiones, de viejas opresiones abatidas, de nuevas libertades reencontradas, de nuevas opresiones impuestas y de viejas libertades perdidas” (Luigi Ferrajoli).

Después de escuchar los audios en Internet a través de Reporte Índigo de lo que aparentan ser varias conversaciones –en tono preocupado- del Secretario de Comunicaciones y Transportes, Luis Téllez, cobra relevancia el tema de la libertad de expresión en Internet y otros servicios de telecomunicaciones. En especial cuando el ejercicio de ese derecho fundamental en nuestro país se está convirtiendo en un acto heroico entre las amenazas del crimen organizado, de los poderes fácticos y, aunque parecía algo superado, también del Gobierno. México ocupa el vergonzoso lugar 140 debido “a la existencia de personas que incumplen la ley para enriquecerse y penalizan a los periodistas con impunidad”, según Reporteros sin Fronteras. ¿Qué están haciendo el Congreso de la Unión, la Secretaría de Gobernación, la Suprema Corte de Justicia de la Nación y los poderes estatales?

México es mucho más que la capital del país. Si eso se olvida, se corre el riesgo de que se establezcan feudos, con sus propias leyes contrarias al avance en derechos fundamentales a través del uso de tecnologías de la información y comunicaciones como el Internet. En el hermoso estado de Nayarit, recientemente han aprobado reformas en materia penal que ponen en riesgo el ejercicio de la libertad de expresión y, en especial, a través de Internet. La exposición de motivos argumenta que es urgente “establecer medidas de regulación en Internet”, al tiempo que la reforma aprobada por el Congreso de Nayarit convierte en delito las conductas que tiendan a generar, difundir o propagar información “para tratar de menoscabar la autoridad del estado o presionar a la autoridad para que tome una determinación”.
Primero sorprende cómo Nayarit busca regular Internet cuando a nivel nacional e internacional las discusiones de ese tópico son interminables. Los regímenes que han “regulado” Internet han sido los autoritarios. Reporteros sin Fronteras tiene un listado de los enemigos del Internet que a la fecha son: Arabia Saudita, Bielorusia, China, Corea del Norte, Cuba, Egipto, Etiopía, Irán, Myanmar, Siria, Túnez, Turkmenistán, Uzbekistán, Vietnam y Zimbabwe. ¿Estará luchando Nayarit para ingresar a esa lista?

Segundo, el lenguaje abierto y sin límites de “tratar de menoscabar la autoridad del estado” suena más bien a una ley mordaza. Al criticar la gestión o expresarse contra el gobernador nayarita Ney González, ¿se estaría menoscabando la autoridad del Estado? Dependerá de quién sea el juzgador y, si el poder judicial local está subordinado al gobernador, podrían estarse gestando nuevos casos de quebranto a la libertad de expresión tipo poblano como del Gober Precioso.
Tercero, la autoridad fue elegida para tomar decisiones a favor del interés público, aun cuando sus determinaciones no sean populares o vayan en contra de grupos de poder. Si la autoridad se deja presionar para su determinación, ¿se debe penalizar el ejercicio de la libertad de expresión o más bien se debiera destituir al gobernante?

Sin libertad de expresión, no existe una opinión pública libre que es un requisito esencial para un Estado democrático y para el ejercicio de otros derechos fundamentales. Cualquier régimen democrático precisa el respeto irrestricto al ejercicio de la libertad de expresión. El caso Nayarit, ¿estará sucediendo en otros estados?

La Internet Society, capítulo México, realizará el simposio “Internet 2009” este jueves 19 de febrero en el Centro Cultural del México Contemporáneo de la ciudad de México(www.isoc.org.mx). Será un foro abierto a todo público para el análisis y debate sobre el Internet para el desarrollo de la Sociedad del Conocimiento en México.

domingo, 8 de febrero de 2009

TV por Internet, ¿Telmex infringe?

Telmex tiene prohibido expresamente en su concesión prestar servicios de televisión a través de su red y ahora está transmitiendo televisión y videos por Internet. La Cofetel y la Secretaría de Comunicaciones y Transportes han dado señales de pretender verificar si dichas transmisiones en Uno TV noticias a través del portal prodigymedia.com violan o no la concesión de Telmex. ¿Habrá infracción por Telmex? ¿Qué repercusiones habría en el Internet en México? ¿Qué mensajes se desprenden de esta escena? Veamos.

El escenario es: Telmex es la única empresa de telecomunicaciones que está impedida de prestar servicios de televisión al público, entendiendo ésta como televisión de paga; la Cámara Nacional de la Industria de la Televisión por Cable (Canitec) está haciendo hasta lo imposible para que la SCT retrase indefinidamente –como lo ha hecho-, la resolución de modificar o no la concesión de Telmex para que sea un competidor en el mercado de televisión por cable; Telmex ha presentado un juicio de nulidad contra la falta de respuesta de la SCT que al menos tardará en resolverse un par de años (la justicia pronta y expedita sólo existe en el texto de nuestra Constitución, pero jamás en la realidad).

La concesión de Telmex señala que: “Telmex no podrá explotar, directa o indirectamente ninguna concesión de servicios de televisión al público en el país” (Condición 1.9). Si el servicio de televisión o radio por Internet a esta fecha en México, no requiere de una concesión, ni de un permiso de la autoridad, ¿por qué la Cofetel o cualquier otra autoridad quisieran supervisar si Telmex cumple o no con su concesión? Lo alarmante de esta actitud es el impacto que puede tener en la radio y televisión por Internet en general.

Recuérdese que a diferencia de la radio y televisión abierta en la que el control es centralizado (por propietarios y gobiernos) y de la televisión restringida en la que se requieren inversiones considerables y sólo es para los que paguen una suscripción, en televisión y radio por Internet cualquier persona con los conocimientos y equipos para grabar, puede difundir videos o contenidos (como programas de televisión) y está dirigida a cualquiera que tenga acceso a Internet. Esto último se refleja en las condiciones de uso del portal prodigymedia.com de Telmex al señalar que el usuario debe “tener acceso a la red mundial de Internet, en cuyo caso el Usuario será el único responsable de cualquier cuota o gasto relacionado para conectarse o utilizar Internet para el uso del Portal”, es decir, las transmisiones y videos están abiertas al público y no tienen costo.

Sería gravísimo que el gobierno mexicano pretendiera en estos momentos regular la radio o televisión por Internet de Telmex, de El Universal o de cualquier otra persona. ¿Cuál sería la finalidad? En el caso de Telmex algunos podrán argumentar que es para frenar su poder de mercado –aunque para eso está la Comisión Federal de Competencia-, pero para el resto de los mexicanos más bien configuraría un ataque frontal a la libertad de expresión y el derecho a la información.

¿Qué mensajes quedan para el sector? Primero, Telmex con su prodigymedia está demostrando que puede proveer una variedad de contenido para todo público con categorías de entretenimiento, deportes, mundo y cultura, contenidos infantiles, noticias (TV en vivo), y videos de portales de la web. Segundo, Telmex con su portal muestra su poder para establecer alianzas con otros medios, para producir contenido y para aprovechar un espacio más de publicidad para las empresas de su grupo corporativo. Tercero, mientras la SCT resuelve por iniciativa propia u obligada por los tribunales respecto a si Telmex puede o no prestar video, Telmex se está preparando para entrar de lleno a la televisión a pesar de los esfuerzos en contrario de la Canitec y sus demás competidores. Los rivales de Telmex piensan que sacando temporalmente de la batalla a Telmex lo debilitan, pero ¿se estarán equivocando y más bien dándole tiempo para fortalecerse?

Concentración y horas pico [Del Reglamento de la SCT y Tarifas Celular]

Aparentemente México busca la simplificación administrativa y, conforme a la tendencia mundial (excepción hecha de Cuba o Venezuela, por ejemplo), pretende buscar la descentralización de las funciones de la administración pública. Sin embargo, esto está lejos de cumplirse en el sector de telecomunicaciones con la publicación del Reglamento Interior de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes. Aquí más bien parece que estamos regresando al pasado, a la época del centralismo a ultranza, sin que redunde en beneficios o que permitiera que México tuviera al menos una política pública en el sector.

Al Secretario Luis Téllez le incrementaron sus facultades indelegables de 18 a 23. Las cinco adicionales son las que le quitaron a la Comisión Federal de Telecomunicaciones. Pero, ¿por qué? ¿Buscaban fortalecerlo, distraerlo de su función principal de dirigir la política del sector o ejercer un control férreo para negociar con los operadores?

 Las modificaciones a las concesiones antes las realizaba la Dirección General de Política de Telecomunicaciones (DGPT) y la Cofetel. Hoy, esa función es indelegable del Secretario lo que implicará que éste tendrá que decidir si, el concesionario Cable T.V. Colotlán de Sombrete, Zacatecas, puede prestar servicios ahora en Valparaíso. Claro, también decidirá si Cablevisión o Movistar pueden o no prestar un servicio adicional. ¿Estaremos volviendo a la era de la discrecionalidad?
 La aprobación de tarifas a concesionarios (únicamente Telmex y Telnor hoy día) la realizaba la Cofetel. Hoy, el Secretario realizará esa función. En cambio, son direcciones de área o direcciones generales las que ejercen atribuciones en materia de tarifas en el caso de caminos y puentes federales, aeronáutica civil, autotransporte federal y transporte ferroviario. ¿Por qué en telecomunicaciones se requiere la intervención del Secretario y en el resto de los sectores a su cargo no?
 La aprobación del programa de licitación de frecuencias y de órbitas satelitales correspondía a la DGPT, hoy será el Secretario quien lo apruebe. Al público nunca se dio una explicación de este cambio, ni la racionalidad detrás de ella, tal como ocurría en el pasado.
 Por ley, Cofetel debe “elaborar y mantener actualizado el Cuadro Nacional de Atribución de Frecuencias”. Éste es reflejo de lo que México a nivel internacional acuerda en las Actas de las Conferencias Mundiales de Radiocomunicación que después son ratificadas por el Senado. La ley también establece que Cofetel “tendrá autonomía plena para dictar sus resoluciones”, pero eso no importó para los que diseñaron el Reglamento y lo sometieron a la firma del presidente Felipe Calderón, metieran un cuña –no prevista en la ley- y le dieron esta facultad indelegable al Secretario. ¿Qué gana el Secretario? Nada, más que reducirle el tiempo de generar política pública.

La doble ventanilla y los procesos fragmentados se consolidan con este Reglamento. La ahora Dirección General de Política de Telecomunicaciones y de Radiodifusión revisará, lo ya revisado por Cofetel, en materia de concesiones, para que después –seguramente- sea revisado por otra área antes de la firma del Secretario. ¿Simplificación administrativa? Todo esto impacta negativamente en las telecomunicaciones y la competitividad del sector.

México carece de políticas públicas en telecomunicaciones, en materia satelital, de banda ancha, de servicio universal, etcétera. Es más, no existe una sola política pública de telecomunicaciones. ¿No sería mejor que eso lo realizará el Secretario en vez de sus nuevas facultades?

Horas pico. ¿Sabe usted cuál es la hora pico para las llamadas que hace desde su celular? Como referencia, para Telcel horas pico (tarifa completa) son de lunes a domingo de las 8 de la mañana a las 9.59 de la noche. ¡Ni el tráfico en el Distrito Federal es pico en domingos, pero para Telcel sí! Así que si usted llama un lunes en horario de oficina o un domingo a las 8 de la mañana, le cobrarán la misma tarifa completa. ¿Qué le parece?